Trianorte Buenos Aires: Entrenamiento integral de triatlón
 

XXX

Cómo Relevar en el Pelotón

Pedalear a toda velocidad dentro de un pelotón es sin duda una de las experiencias más apasionantes que se pueden experimentar sobre una bici.

Ir a rueda nos permite ahorrar alrededor de un 30% del esfuerzo.

Sin embargo, para aprovechar esta ventaja todo debe fluir con armonía. Ya no sólo por la búsqueda del máximo rendimiento, sino por evitar situaciones de peligro, críticas a las altas velocidades que se pueden alcanzar cuando sumamos nuestro esfuerzo al de los compañeros de pelotón.

Sin miedo

Pedalear a toda velocidad a pocos centímetros de la rueda del compañero o tan cerca que te llegues a tocar es una fuente de estrés para muchos ciclistas que se ven limitados en este entorno a causa de una escasa capacidad técnica.

Si no somos capaces de hacerlo es mejor que nos mantengamos al final del grupo o con salida hacia un lateral, dejando a los demás que pasen al relevo. Una vez que nos metemos en la vorágine la regla principal es tener presente que “No vamos solos”; es decir, tenemos que evitar frenadas o movimientos bruscos o lanzar la bici hacia atrás cuando nos ponemos de pie. Son pequeñas cosas, pero tenidas en cuenta nos van a permitir disfrutar realmente de las ventajas de rodar en un pelotón, siendo capaces de ver en nuestra computadora medias de velocidad inimaginables con apenas una fracción del esfuerzo que nos costaría eso mismo estando solos. Demasiado tentador como para no aprovecharlo.

De donde viene el viento

fotos_01fotos_02A la hora de circular a rueda y hacer los relevos, muy pocos tienen en cuenta este factor, tan importante a la hora de ahorrar fuerzas. El viento prácticamente nunca nos incide de forma frontal, sino que lo hace más o menos angulado. Evidentemente, para protegernos del mismo no iremos detrás del ciclista que nos precede, sino un poco al costado. De la misma forma, el lado por donde entra el aire marca por donde se dan los relevos. El que va delante se deja caer por el lado del mismo, mientras los ciclistas que pasan permanecen protegidos hasta el último momento. Sólo en las escasas situaciones sin viento o con él frontal podemos relevar indistintamente por uno u otro lado.

fotos_03En el punto anterior hablábamos de donde hay que colocarse con viento lateral, pero claro, si quien va tirando se pega al lateral contrario al viento no queda espacio donde ir protegido, con lo que todos los que vienen atrás sufren el efecto del viento y el ir a rueda ya no tiene efecto. En las carreras solemos disponer del uso completo de la calle por lo que es mejor compartir esfuerzos y abrir la ruta para que los demás puedan protegerse. Es una buena manera colaborar entre todos.

Dentro del grupo

fotos_04Nos encontramos en una carrera rodeados por varios ciclistas y queremos avanzar posiciones ¿Qué hacemos? Los laterales son la opción más segura, izquierda o derecha, según venga el aire, aunque ahí quedamos desprotegidos del viento. Por supuesto, sin invadir en ningún caso el otro carril. Muchos sin embargo se empeñan en pasar por el medio lo que sólo sirve para provocar tensión y frenadas repentinas. Es también importante cuando vamos en el centro del grupo, no sobrepasar con nuestra rueda delantera la rueda trasera del que nos precede -meter rueda – ya que ante cualquier movimiento del ciclista de adelante es muy probable que se toquen las ruedas, y nos vayamos al suelo.

Relevos en el grupo

fotos_06La normativa de tráfico nos permite circular en grupo en fila de a dos. Cuando los dos ciclistas que están delante tirando quieren dejar su lugar para que otros dos pasen a relevo pocos tienen claro la forma correcta de hacerlo, produciéndose en muchos casos situaciones comprometidas. Como se puede ver en la foto, la forma ideal es que cada uno de ellos se deje caer hacia su lado, dejando que el grupo los vaya superando para engancharse a rueda al final del mismo y nunca levantar el pie (aflojar el ritmo).